Curiosidades y sorpresas.(Libre y si es posible que sea un vampiro)

Las dos primeras semanas en Forks se me habían pasado algo mas lenta pero estas dos siguiente se me estaba pasando volando, casi sin darme cuenta ya había pasado un mes en este pueblo. Ya había ido a mis primeras clases en el instituto y por fin estaba practicando nuevamente lo que mas amaba en este mundo, mi violín, así lo sentí la primera vez después de mucho tiempo cuando mis dedos empezaron a moverse por las cuerdas con mucha soltura y elegancia, el escuchar los primeros acordes de mi pequeño me hacia estremecer de alegría.

Soltándolo sobre su estuche me acerque a la ventana y observe que desde mi casa se podía ver el bosque, ese hermoso paisaje que aunque estuviera tan cerca de la civilización siempre me había llamado mucho la atención. De solo pensar el andar por esos bosques llenos de animalillos y pájaros me hacia reírme,pero rápidamente cambiaba mi rostro cada vez que recordaba en mi cabeza aquellos ojos negros y con una expresión muy sería, que me decían "no vayas a entrar en el bosque que no es buena idea".

Sacudiendo mi rostro un par de veces para sacarme esa absurda idea que se me había metido en la cabeza.-Debería hacer caso a Jake... no debería ni asomarme por allí. Pero es que quiero ver un bosque de cerca... Hay tenía razón, cuando vivía en madrid poco había visitado excepto el zoologico de allí y poco mas, solo pisaba la ciudad.

Bajando las escalera corriendo llegue a la puerta de casa,la abrí de golpe y mire hacia la derecha y luego hacia la izquierda, al darme en los ojos unos fuertes rayos de sol volví a levantar mi rostro hacia el cielo. Estaba comprobando por primera vez desde que había llegado que también existían los días buenos con sol y todo, que no solo era lluvias y vientos como me había comentando Jacob aquella vez.
-Es como si me estuviera invitando a que entrara...-Murmure tapándome los ojos con una de mis manos y con la otra cerraba la puerta. Sin embargo al fondo de la cocina oí a mi madre llamándome para saber que estaba haciendo en el portal de la casa.
-Clare... cariño.. ¿A donde vas?-Pregunto mi madre mientras se asomaba por el marco de la puerta.

-Voy a dar un paseo.-Le conteste cerrando la puerta cuando de pronto la abrí de golpe, se me ocurrió algo y no iba a desaprovechar esa ocasión para practicar en mitad de la naturaleza. Subiendo las escalera cogí el violín cuando lo metí antes en el estuche, bajando otra vez salí de mi casa para ir directa hacia la entrada del enorme bosque.

-Solo voy a estar cerca,solo eso y no me moveré hasta muy lejos.-Me dije a mi misma asintiendo con la cabeza mientras mis piernas me llevaban al inicio del hermoso bosque. Solo iba a tocar..

¿que mal podía hacer eso?

Avance a paso ligero por un pequeño camino donde desaparecía en un montón de ramitas y hojas que estaban esparcidas por todo el terreno, Contemplando lo que iba apareciendo ante mi me quede muy sorprendida y hasta maravillada,era exactamente como me lo estaba imaginando. Como un bosque llenos de hadas,era como si sintiera que en cualquier momento fuera a aparecer alguna entre los gruesos troncos.

Una hermosa melodía se escucho en todo el lugar, era una música calmada,relajante y hasta dulce en algunos momentos de en que cambiaba el tono cuando mis dedos se deslizaban por las cuerdas de una manera casi instintiva.

Habia pasado en casa otra semana castigado, claro... nunca pienso en mis acciones al realizarlas no, siempre tengo que adelantarme a mis pensamientos. Cuando llegué a casa mi padre me montó un pollo que casi me hizo salir de mis casillas. Mi padre habia notado que últimamente estaba mas nervioso de lo normal y mas respondón, pero en vez de regañarme por ello, lo dejó pasar, aun no me lo explico.

Tenia unas sensaciones extrañas, lo del parque había sido muy raro, el mal olor se fue en cuanto llegué a casa, y esa sensación de desconfianza igualmente, cesó al alejarme del parque, de Forks en general. Jaja, era curioso, casi dos semanas castigado y seguido, estaba deseando que mi hermana volviera de viaje para distraer a mi padre, ademas, seguro que estaría de mejor humor con ella en casa.

Yo estaba en el cuarto, tirando en la cama que ocupaba toda la habitación, mirando el techo pensativo, eso de la cama era nuevo, tenían que cambiarla ya que la anterior se me quedaba pequeña, cuando se lo conté a Quil se partió de la risa en mi cara, no era de extrañar, aunque no se de que se reia tanto, él tambien era muy grande, y Embry... bueno... a él hacia mucho que no lo veía, ahora prefería irse con los sectistas, cuyo lider era Sam. Con un pequeño gruñido me incorporé de la cama cuando escuché como alguien llamaba a la puerta y entraba.

- Jake, ¿en tu ultimo viaje a Forks no escuchaste ningún rumor mas sobre las "bestias" del bosque?- Preguntó mirándome con severidad, yo simplemente le negué lentamente, desganado. - Parece ser que hay nuevos visitantes...

- ¿Nuevos visitantes? ¿quienes?!- Abrí los ojos de par en par.

- No puedo decírtelo...- Dijo volviéndome la cara algo dolido.

Me enfadé, y mucho ademas, levantándome de la cama y mirándolo de la misma forma que él lo había hecho con anterioridad.

- Si no vas a decírmelo tu, voy a ir a comprobarlo- Dije pasando a su vera, cuando sentí su mano aferrarse a mi muñeca, mirándome con enfado pero a la vez con suplica, gritándome un fuerte "NO" que me hizo estremecer, pero era tarde, ya me estaba estremeciendo.

-¿que vas hacer?, ¿detenerme tu?- Dije sin pensar, como siempre hacia, sin haber calculado mis palabras, había herido a mi padre, el cual me soltó de la mano, y antes de que se marchara, yo ya había echado a correr, saliendo de casa y volviendo a coger la moto, arrancándola y salir disparado en dirección a Forks, no quería pensar en la discusión con mi padre, quería saber esta vez que había en el bosque.

No tardé mucho en llegar, tuve que aminorar la velocidad en cuanto entré por las calles de Forks, me quedé mirando las fachadas de las casas viendo a lo lejos la de Clare. Aceleré un poco mas hasta situarme a un lado del bosque, adentrándome un poco con la moto con la que comenzó a botar apresuradamente, tanto que casi podía cargármela, así que la aparqué malamente y comencé a correr al interior del bosque, sin echar cuentas a la moto.

Corria y corria sin ningun sentido, mirando a mi alrededor, haciendo que mis sentidos se acostumbraran ahora al sonido de la naturaleza, hasta que por mi oido entró un sonido muy distinto, un sonido musical, provenía de un violín, la melodía era preciosa, parecía que alguien estaba tocando en un claro cercano y era bastante experimentado, por lo que ya mismo pensé que podría ser un chupasangre, si, ya estaba obsesionado con ese tema, pero lo pensé por la experiencia o simplemente porque me estaba volviendo loco.

Seguí esta vez con cautela el sonido, mis cabellos estaban alborotados por toda mi cara, despeinados, no había orden en ellos, al igual que mi ropa que se había manchado y arrugado por la caminata en el bosque. Pude ver la espalda de la figura, era una mujer, pues sus curvas la delataban, me fui acercando mas hasta que con sigilo me adentré en el mismo claro donde ella estaba. No se había percatado de mi entrada, y desde allí pude ver de quien se trataba, no salí de mi asombro... era?...

- ¿Clare?... p... ¿pero que haces aquí?- Dije mirándola atónito, dejando que mi aspecto salvaje por la carrera se viera, sin echar demasiada cuenta en estar presentable. Ella no me había hecho demasiado caso, no prestó atención a mi advertencia.

(Dejo el link de la canción, pensad que solo es el violín el que toca y no los acompañantes.You Raise Up.

Siempre me había gustado mucho esa canción, ni yo misma recordaba cuando fue el momento en el que la aprendí y por que, quizás por que me gusto desde el primer instante que la llegue a escuchar o solamente por que me la tenía que estudiar para uno de los exámenes de mi antiguo profesor. Ya no lo recordaba.

La melodía era tan envolvente que me hacia sentirme en otro otro mundo, ¡no! mentira... incluso en otra época donde solo existían la valentía y el amor prohibido. Todavía recordaba ese tema donde empece a leer en voz baja... "Por ti seré mas fuerte que el destino, por ti seré tu heroe ante el dolor... Yo sin ti estaba tan perdido, por ti seré mejor de lo que soy...", esa parte de la canción me llego tan profunda que no sabía el por que de esa necesidad de querer aprendérmela, quería llegar a tocarla como esa misma que estaba escuchando en mi Mp3.

Y después de mucho practicar lo conseguí,aunque su esfuerzo fue para que saliera como yo quería ya que no lo quería estropear con mi torpeza. Moviendo mis finos dedos por el violín fue interpretando cada nota como si fuera la ultima,como si fuera mi vida en ello y en ese intento solo valiera mi próximo movimiento para hacerlo aun mas radiante de como estaba quedando.

Estaba tan atenta a mi música y mis propios sentidos que ni siquiera llegue a darme cuenta de que alguien estaba detrás mía, solo importaba yo y nadie mas. Sin embargo en un despiste mio o tono diferente que me llego a desconcentrar haciéndome perder el hilo por completo de la canción. Parando de golpe me gire mirándole cuando mis ojos se abrieron como platos, estaba muy sorprendida de ver a Jake allí.

-¡Jake! ¿Yo?...esto... -Le sostuve la mirada mientras trataba de encontrar las palabras correctas a esa misma pregunta. Bajando el violín me quede quieta unos segundos y luego lo volví a levantar en alto.-Practicar..-Ahora si que sabía que me tocaría una buena bronca, el solo recordar aquellos ojos oscuros pidiéndome que no fuera al bosque era por algún motivo que yo aun desconocía.

Como era de esperar habia cogido totalmente desprevenida a Clare y el hermoso sonido que realizaba con unas complicadas notas se había cortado totalmente, haciendo que la chica se volviera totalmente sorprendida al verme allí, parado en frente de ella y con varios... mejor dicho bastantes centímetros mas alto que la ultima vez que nos encontramos.

La miré a los ojos con la misma intensidad que la ultima vez, severamente y dolido por haber pasado de mi advertencia, en fin... ¿que esperaba?, que una chica de ciudad haria caso a un "indio"?.

- Practicar... ya... un poco lejos de casa ¿no?... pero bueno, no soy nadie para impedirte nada, pero te lo pedí Clare, este lugar no es seguro- Dije dando varios pasos hacia ella hasta situarme a un metro justo de distancia, dando un suspiro aun enfadado, su rostro era un poema, no me gustaba ser así de duro pero tenia que hacerlo, estaba molesto, muy molesto.

Suspiré y en cuanto iba a hablarla una voz muy conocida y salvaje me heló la sangre, la voz... de Rosalie?. Mi primera reacción fue abrir los ojos de par en par y mirar a Clare, para luego girar mi cuerpo hacia atrás, pues de ahí provenía aquel torrente femenino y furioso a la vez. No me dio tiempo a girarme en su totalidad, ya la tenia encima, era como si me hubieran golpeado con una gran bola de piedra sobre mi pecho, por lo que realicé un gemido de dolor, para luego soltar un grito al sentir como mi espalda chocaba con el suelo con violencia, viéndome arrastrado unos metros, notando como la ropa que cubría mi espalda comenzaba a rasgarse.

Rosalie estaba muy enfadada, furiosa, sus ojos dorados estaban clavados en mi persona, era realmente aterradora, demasiado como para aguantar mi miedo, porque era cierto que estaba asustado, tenia sobre mi a una vampiresa, encima enfadada!.

- Clare! vete de aquí, corre!- Grité a la vez que coloqué mis manos sobre los brazos de la estatua de piedra albina, sintiendo su gélido tanto que me causaba escalofríos.

- !Quita de encima sabandija!- Era inútil deshacerme de ella por el momento hasta que ella cediera, pues su cuerpo era descomunalmente fuerte y sus manos en mis brazos eran grilletes, gemía al forcejear inútilmente mientras clavaba mi mirada azabache en la suya, oscura como ella. Esperaba que se distrajera conmigo, no podría dañar a una humana.

Mi cuerpo estaba temblando, pero desconocía ese extraño movimiento ¿miedo?, ¿furia? o una mezcla de las dos?

Apenas me dio tiempo casi a contestarle después de que el me diera esa clase de clarla, muy corta al principio me pareció pues se quedo callado durante un buen rato. Seguramente estaba enfadado y hasta indignado por no haberle hecho caso en ese tema sobre que era demasiado peligroso el bosque. Pero... ¿Por que? ¿Que razón podría haber para que Jacob no quisiera que pisara el bosque?

-Bueno eso.. es que quería ver en persona la naturaleza de este sitio y como nunca había pisado en mi vida un verdadero bosque quería experimentarlo aunque solo fuera una vez.-No es que me estuviera excusando con el, solo le estaba intentando dejar claro el por que estaba allí y ademas tocando.

-¡Ya lo se lo que me dijist...-Ese pequeño grito no había apenas terminado de salir de mi garganta cuando algo sorprendente paso delante de mis ojos. Primero oí una voz femenina por lo que mire hacia aquella dirección encontrándome con algo inexplicable y hermoso, en una de las ramas se encontraba una chica de cabellos rubios y mirada penetrante, y su voz.. difícil de reconocerla pues me estaba transmitiendo directamente odio, furia y incluso rencor. Dirigiendo mi mirada a Jacob mis cejas se arquearon levemente al descubrir que no se encontraba en el mismo lugar de un minuto antes, ahora esta a varios metros lejos de mi y con aquella chica de piel blanca encima.

¿Cuando llego a suceder eso sin que apenas me diera cuenta? ¿En que momento se trasladaron?

-¡¡JAKE!!-Fue lo que solté de golpe mientras empezaba a temblar, todo mi cuerpo estaba temblando por el miedo.. y lo peor es que no me podía explicar por que todos mis sentidos me estaba gritando a todo pulmón que me largara de ahí, que era mujer era algo diferente a mi. Que por mucho que pareciera de mi misma edad bajo esas facciones deformadas por la furia se escondía apenas una chiquilla.

-¡No voy a irme de aquí dejándote solo!-Alzando mi rostro hacia un lado y luego al otro intente buscar algo para detenerla, cualquier cosa serviría para apartarla de el o eso pensaba yo.

Al no encontrar nada y pareciéndome un poco fuerte el golpearla con algún objeto, voy y corro hacia ella donde le coloco las manos en los hombros para pararla. Pero para mi asombro descubro algo nuevo... ¿Que no la conseguía mover ni un milimetro de donde se encontraba?, encima de Jacob.

Yo seguía forcejeando inutilmente y la desesperacion nublaba mi buen juicio y apunto estaba de llamarla de todo en ese preciso momento, pero pronto cambie de idea, eso no me iba a ayudar, al contrario, perdería fuerzas en decir estupidas palabras que ella ignoraría. Jadeé apresuradamente, notando como varias gotas de sudor resbalaban por mi frente la cual notaba como ardía. Maldita sea... ¿ahora iba a ponerme enfermo?, maldita Leah! la tarde anterior me había mojado en la orilla de la playa de LA Push!. Tenia que ser eso, porque me estaba comenzando a sentir mal, sobretodo agotado aunque por otro lado sentía como si las fuerzas se me renovasen, una sensación muy extraña, pero las interpreté como a causa de lo que allí estaba sucediendo.

Tras los blancos hombros de mi rival, pude ver el rostro asustado de Clare, ¿que hacia aun alli?, ¿y porque estaba tocando a Rosalie?!, no me dió tiempo a reprocharle nada a que la vampiresa se había percatado de Clare, y me dijo algo que me hizo estremecer. Rosalie estaba insinuando que había traído "publico", haciéndome sentir culpable por el hecho de que la humana estuviera allí, no podía sentirme asi, no ... no era mi culpa, Clare vino por voluntad propia. La miré con una fúria enfermiza, una mirada que yo no solia usar nunca.

No la toques...- Dije entre dientes, pues éstos comenzaron a rechinar con fuerza, tanto, que creí que me los iba a romper de tanto apretar. Rosalie se habia levantado y había escapado de mi campo de visión , no sin antes advertirme de que me estuviera quieto. ¿acaso creía que la iba hacer caso?.

Lentamente, turbado me fui levantando. Apoyé mi pie en el suelo, mientras sujetándome en el tronco de un árbol iba incorporándome, llevandome una mano a la espalda, me escocia, seguramente habría sufrido algún que otro corte por culpa de algunas rocas que sobresalían del suelo del bosque, y la ropa... para tirar. Mi respiración estaba agitada, demasiado, que creia que me iba a dar algo, un infarto o algo así porque me notaba demasiado apresurado como para que pudiera contarlo. Zarandeé la cabeza para retirar mis cabellos sueltos que se esparcían por toda mi cara, y entre ellos vi a la dama de cabellos dorados a mi espalda, amenazando de alguna forma a Clare, enfadada por las intensiones de la humana de golpearla.

En ese preciso momento, sentí una gran convulsión en mi cuerpo, una que electrificaba mi columna vertebral de un modo que me produjo un agudo dolor, pero se detuvo, aunque el temblor de mis manos y de mis piernas no cedían, ¿pero que clase de virus había cogido, mi cuerpo estaba reaccionando de una manera demasiado rara, y mi frente... estaba ardiendo, ardiendo en fiebre, pero no podía dejar a Clare con ese peligro, por lo que, sin saber como, di tres zancadas hacia Rosalie, las suficientes para clavar mis dedos en sus duros hombros, realizando una pequeña llave alrededor de su cuello para alejarla de ella, lo hice con fuerza, pero las convulsiones evitaban que lo hiciera con firmeza por lo que lo mas seguro es que Rosalie pudiera escapar, y mas siendo lo que era.

- No puedes dañarla!, romperás el tratado! ya la has roto conmigo!... - Dije gritándola con fuerza, sintiendo una infinita ira hacia la Vampira que agarraba a duras penas, notando como mi voz se veía levemente codificada por un pequeño grujido que salia de mi estomago... ¿que ocurría?

- Clare!....tsk...- No sabia que decir, estaba demasiado atento a mantener mi cuerpo tranquilo, intentar calmar esas convulsiones, y dejar mi mente trabajar para pensar en algo contra Rosalie

Apartándome de aquella mujer, di unos dos o tres paso hacia atrás mirándola cuando se había girado y ahora me estaba encarando. En su rostro se veía claramente parte de su enfado, quizás por lo que antes le estaba gritando a Jacob sobre algo anterior donde yo no había estado presente o por ese repentino intento de entrometerme entre ellos para salvar a quien conocía.

¡¿Por dios como no iba a meterme en medio si estaban atacando a una persona?!

Clavando mi mirada ahora en ella me quede sin habla, no podía responderle a eso porque era la pura verdad de que pensaba golpearla con algo. Apretando mis labios y soltándolos a continuación le conteste con un nerviosismo incontrolable, tan aproximado como mi propia voz ahora que estaba apunto de quebrarse por el puro terror que estaba sintiendo.

-¡T...tenías a Jake prisionero! ¡¿Por que lo has atacado de esa manera?!Le conteste tragando saliva, tan trabajosamente que me parecía que en cualquier momento se me iba a cerrar la garganta. No podía respirar...

Bajando el rostro hacia mis pies, escuche como le decía Jacob a aquella mujer que no me tocase, por como lo estaba diciendo deduje que no lo estaba diciendo de broma, su voz estaba algo tomada al igual que su rostro cuando lo mire.

Quedándome petrificada contemple claramente al chico,lo que estaba viendo tendrían que ser imaginaciones o mis ojos me estaban engañando a esa escena. ¿Estaba teniendo convulsiones?, no podía ser cierto... Pasándome las manos temblorosas por el rostro trate de que ese espejismo se alejara como fuera, Volví a mirar nuevamente y habían desaparecido aunque sus brazos no paraban de temblar.
Asustándome aun mas dio otro paso al repentino movimiento de Jake, un segundo después de que estuviera en aquel extraño estado, ahora la estaba sujetando por los hombros a la mujer como si le costara pero que finalmente lograra algo y no como yo que ni pude moverla.

-¡Jake no! ¡es una chica no le hagas daño!-Grite no moviéndome de donde estaba por mis propios temblores. La visión se me estaba empañando por culpa de las primeras lagrimas que empezaron a aparecer en mis ojos por culpa de la frustración y en parte culpa, si no hubiera estado aquí seguramente Jacob no hubiera venido y esta rara pelea se hubiese evitado.

Todo estaba sucediendo muy rápido, parecia como si Rosalie hubiera tenido un dia de espanto por la furia y el odio que demostraba en cada uno de sus movimientos, incluso acercandose de esa manera tan amenazadora a una humana, a la cual se le tenia prohibido tocar pero... ¿porque me tocó a mi?, ¿no me consideraba como humano? era casi una ofensa.

Clare reaccionó de un modo que esperaba, estaba totalmente asustada y su rostro lo reflejaba al igual que las amargas lagrimas que ahora recorrían sus mejillas, algo que aprovechó Rosalie para hacerme sentir mal, pero no lo iba a lograr, me preocupaba mas el motivo por el que lloraba, que el simple hecho de hacerlo, allí no habia culpables, sino victimas.

¿Que no le pegara a una mujer? ¿a cual?, porque yo no veía a ninguna, sus palabras me hicieron dudar pues no quería que me viera como un hombre insensible que golpeaba a una mujer... pero no se estaba dando cuenta?, la naturaleza de Rosalie no era para nada humana.

Fue en ese preciso momento cuando sentí un gran impacto en la boca de mi estomago, haciendo que mis ojos se abrieran de par en par y mis pupilas se dilataran al maximo, mi boca se abrió soltando un pequeño quejido pues no pude gritar por falta de aire. Mi cuerpo se desfalleció, cayendo de rodillas para luego de costado. Agarré con fuerza mi estomago temblando por el dolor y por el hecho que aun desconocía, cerraba los ojos por inercia, el dolor era insoportable y mi cara parecía volverse de un color mas rojizo pues aun estaba sin respiración, ese golpe no era natural, si ya dolía por alguien con fuerza humana, era de imaginar que una fuerza como la de Rosalie rompía los limites del dolor.

Por fin pude reaccionando, tosí estrepitosamente, intentando incorporarme pero por el momento me era imposible, me había inmovilizado, estaba furioso, Rosalie estaría disfrutando de verme en el suelo, tan débil tan vulnerable frente a aquella que haría que su ego ascendiera al séptimo cielo, pero la miré, la miré con unos deseos de descuartizarla allí mismo. Mis manos ya no podían sujetar mi estomago, temblaban demasiado, casi asustaba, era como si sufriera de parkinson.

- Que poco femenino por tu parte... pegas como un hombre.- Dije clavando mi mirada en la suya, apretando los dientes y notando de nuevo esa electricidad por toda mi espalda, yo estaba al limite mi cuerpo reaccionaba sin que yo pudiera dominarlo, y en Rosalie pude ver que ella también se estaba dando cuenta de algo y eso no le gustaría nada.

Clare... a ti no puede hacerte daño... tu... tu serás la testigo...- Dije realmente abatido pues no quería que la humana sufriera lo que allí estaba aconteciendo, pero tenia que presionar a Rosalie, asustarla de algún modo para tener oportunidad de salir vivo de alli, aunque no podía evitar provocarla comparándola con un hombre, si no me doliese el cuerpo, en ese instante, estaría riéndome en su cara... pero como mucho solo pude ofrecerle una sonrisa burlesca.

Juraría de que llegue a escuchar un ruido sordo, como si alguien le hubiera pegado a otra persona pero apenas me había dado cuenta de ese movimiento cuando encontré a Jacob en el suelo, estaba tendido sobre el terreno agarrándose el estomago con las manos o al menos lo estaba intentando pues ese espasmo de sus brazos no le dejaba agarrárselo con firmeza. Levantando mis ojos otra vez y clavando los en la chica de piel porcelana, hice un gesto con el rostro como una negativa a su propuesta de que me largara de allí.

-N.. no voy a irme.-Volví a contestarle con toda la firmeza que podía y que mi voz me permitía, pues estaba aterrada y esa sensación se estaba apoderando de mi cada vez con mas fuerza. Pasando unos minutos que me parecieron eternos volví a escuchar otra vez la voz de mi casi nuevo amigo, girando mi rostro hacia el con incredulidad y con mis ojos como platos me quede quieta y pensativa sobre lo que había llegado a soltar.

¿Por que seguiría metiéndose con ella? ¿No le tenía miedo a aquella mujer tan extraña?

Idiota... ¿Te parece el mejor momento para ponerte a decir esas cosas?Manteniendo mi vista en él no comprendía lo siguiente, lo que me estaba diciendo de que no me podía hacerme daño... ¿Sería eso cierto?,Dando un paso inseguro hacia delante empece a moverme hacia un lado pues estaba tratando de comprobar una cosa, si era verdad a lo mejor podría ayudar a Jake aunque fuera un poco.

-¿Es verdad lo esta diciendo el?-Apreté mis labios y luego lo mordí levemente con los diente, estos estaban temblando haciendo un sonido rítmico en mi boca cuando esta estaba abierta y yo no quería escucharlo pues me estaba poniendo aun mas nerviosa que antes.

Dando otro paso hacia la izquierda empece a tratar de rodear la para poder llegar a mi siguiente objetivo, Jake.

Aun tirado en el suelo bufé frustrado al oir que Clare no se iba a marchar, y yo no estaba en condiciones para impedir algo que podría ocurrir, que resultara herida, aunque ya con lo que estaba viendo se estaba arriesgando demasiado. Encima, para colmo yo le había proporcionado un cierto interés en cuanto se enteró que Rosalie no podía hacerla daño, algo que aprovechó al ver como poco a poco se iba acercando a mi, a mi cuerpo, algo que no quería porque mis extrañas convulsiones me preocupaban en exceso a mi y no quería que ella al verlo de cerca también lo hiciera.

Rosalie seguía con su detestable risa, provocandome en cierta manera para que le mostrara lo que podía hacer... ¿pero que era yo?, no era mas que un simple humano que estaba sufriendo unas extrañas convulsiones. No sabia que era lo que quería de mi. La vampiresa parecía haber ignorado por completo la pregunta de la humana, algo que le daría una respuesta directa.

- Si... si pudiese.. yo...- Dije sintiendo de nuevo esa horrible sensación de descarga a lo largo de toda mi columna vertebral que provocó que diese un ahogado grito, las convulsiones subieron de intensidad pudiendo notar como ya mi cuerpo chocaba directamente con el suelo donde yo estaba tendido. En ese preciso momento sentí como poco a poco la ropa se estrechaba de una manera tan brusca, que rápidamente se rompió. No pasó mas de unas milésimas de segundos para sentir el frio hielo del viento cuando de nuevo sentí calidez. Mi cuerpo había explotado o eso creí yo. Notaba que ganaba altura y que pronto mis ojos al abrirse de nuevo no eran capaces de detectar colores, todo lo veía en blanco y negro.

Fue ahí cuando me percaté, mis gritos se transformaron en gruñidos, mi cuerpo alcanzó cerca de dos metros y de longitud tres, estaba completamente lleno de una pelambrera larga y suave de color marrón oscuro. No estaba soñando, me había convertido en un gran lobo, y me mirada se fijó ahora en Rosalie, e instintivamente le mostré unos dientes afilados donde de ellos comenzó a resbalar una pequeña masa de saliva por toda la rabia contenida.

Estaba asustado y a la misma vez eufórico por poder acabar con esa chupasangre, aunque tenia miedo de herir a la humana que se fue acercando pero que se paró en seco al ver mi transformación. No dudé ni un segundo, aunque no estuviera muy acostumbrado a esas patas peludas, di un salto hacia el ser al que odiaba con todas mis ganas, la sed de venganza estaba reinando en mi, por lo que hundí mis dientes en su duro hombro que para mi, ahora parecía mantequilla. La mordí, si, con fuerza, intensidad a la vez que seguía gruñendo como una bestia, deseando que me acostumbrara a ese nuevo cuerpo para arrancarle la piel.

No me respondía a esa pregunta que me tenía la mar de intrigada, solo se había echado hacia un lado para dejarme pasar hasta colocarme justamente a unos dos metros de donde se encontraba Jacob. Contemplándolo en el suelo me llegue hasta a asustar pues no sabía y entendía aun menos el por que de aquella convulsiones.

¿A que se podía deber?, Fueron pensamientos algo confusos cuando comencé a ver con mis propios ojos algo realmente sorprendente y absurdo, el cuerpo de ese chico de piel oscura y pelo negro estaba cambiando delante de mi como si fuera una película de terror.

Echando un pie hacia atrás y con la garganta completamente seca empecé a cuestionarme todo aquello, todo lo que estaba pasando y en lo que se estaba convirtiendo Jacob: Estatura grande, mucho mas grande que un caballo o si no por el estilo, su cuerpo estaba cambiando hasta volverse este por completo de bello y su rostro era como el de un... ¡Lobo!

¿Me estaría volviendo completamente loca o era eso una realidad como que yo estaba ahí delante y en mitad de un bosque con dos seres sobre naturales?

Desviando mi rostro hacia la otra mujer la estudie preguntándome si estaría igualmente de asustada que yo, al verla mejor me fije que en sus ojos había algo extraño y hasta increíble: En esos ojos dorados, si dorados se estaba reflejando el entusiasmo y deseo, como si estuviera esperando que todo aquello ocurriera desde hace mucho tiempo.

-Dios santo... Jak...e... -Fueron las únicas palabras que salieron de mis labios firmemente apretados por el pánico. Dando otro dos pasos hacia atrás intente alejarme de el con miedo y con la esperanza de que no le diera por venirse hacia a mi. Pero algo insólito paso, Ese enorme animal de cuatros patas se fue directo hacia la chica rubia para atacarla.

Girándome hacia ellos trataba de comprender como podía esa chica el aguantar semejante ataque.

¿Por que no gritaba de dolor? ¿Es que no le dolía?

Me maldije a mi mismo cuando me vi poseído por el cuerpo de un gran lobo, un animal fiero que solo se dejaba dominar por la furia, odio y la ira que sentía hacia la chupasangre. Mi conciencia se veía cada vez reducida al simple instinto, y eso me aterraba, muchísimo, pues allí había una persona que no tenia nada que ver en el odio que teníamos ella y yo, no quería que resultase herida, ni por Rosalie, ni por mi, porque no sabia si podía controlarme ya que pensaba en dar un salto y tirarme sobre la vampiresa, dándome igual si también arrastraba a la joven conmigo. Pero una vez que lo pensaba, mi yo humano se negaba en rotundo, a Clare no, a ella no podía hacerle daño.

La voz sorprendida y a la vez asustada de Clare, atravesó mis oídos hasta incrustarse en mi pecho, odiaba eso, ahora tocaba sufrir el que la humana me temiera y saliera corriendo, en fin, seria lo mejor para ella, no se merecía vivir en un mundo irreal donde en verdad existían los licantropos y los vampiros, por eso me negaba ser lo que era... porque quería ser un chico normal y... no lo era, es mas, ya dudaba si era humano o no.

Rugí frustrado, mas bien de sufrimiento que de enfado, aunque el golpe de Rosalie hizo que me chocara violentamente con uno de los arboles que nos observaban, daba igual el haber odio dentro de mi un chasquido, un hueso roto?, ¿dos?, no lo se, sentía que en ese preciso momento no me importaba.

Mis patas temblaron cuando intentaban levantarme de nuevo y percatándome de que Rosalie se había colocado tras Clare, susurrandola, en esa postura no podía saltar y seguir atacándola ya que podia herir claramente a Clare pero... era... era tan tentador despedazarla en trocitos que no pude evitar dar tres rápidas zancadas hasta quedar a pocos centímetros de la humana, pero mirando fijamente los ojos dorados de Rosalie, gruñendo.

Finalmente cerré los ojos retrocediendo de nuevo esos pasos que había avanzado, no quería ver la escena para intentar que mis temblores y mi ira abandonasen mi cuerpo, quería que se marchara... aunque ¿porque no marcharme yo?, Rosalie no seria capaz de herir a la humana...

Me dolía horrores las heridas que había recibido, no levanté la mirada en ningún momento, estaba conteniendome con todas mis fuerzas para irme de allí, por lo que seguía dando pasos atrás, intentando verme rodeado de la oscuridad del bosque a la vez que de vez en cuando, dedicaba una mirada feroz a Rosalie, y entristecida a Clare.

Todo estaba sucediendo demasiado deprisa, tanto que a veces hasta me estaba planteando si esto era realidad o simplemente un sueño de mal gusto. No pudiendo soportarlo mas acabe apoyándome en un árbol donde logre colocar todo mi peso sobre el para poder así ver la feroz batalla que se estaba librando delante de mi, delante de mis propios ojos llenos de sorpresa y sufrimiento por ambos seres. Bien podía ser que en parte estuviera preocupada por esa mujer o por el estado de ese animal, aquel lobo de dos metros era ese chico al que conocí en el supermercado, el que se hacia llamar Jacob Black o mejor dicho Jake.

-P...parad... parad... por favor-Rogué sintiendo como mis mejillas estaban helada, el viento había empezado a soplar suavemente mientras intuía que mis piernas no se mantendrían de pie por mucho tiempo por culpa de los constantes temblores, estos me estaba recordando mucho a los del chico cuando lo estaba mirando en el suelo tendido y con convulsiones por todo su cuerpo.

Finalmente cayendo al suelo de rodilla apoye las manos sobre la hierba y la estruje, la aplaste de tal forma por los nervios y la frustración que invadía mi cuerpo al ver algo semejante y no pararlo por mucho que mas que yo deseara. De alguna manera no quería que ninguno de los dos saliera herida al igual que yo misma cuando alce los ojos hacia lo lejos, estos se abrieron por completo al ver al gran animal tendido en el suelo y a mis espalda escuchando una dulce voz que me estaba susurrando todo el tiempo que era un sueño.

Me levante de pronto intentando dar un par de pasos hacia el lobo para ayudarlo, pero desistí cuando comprendí algo fundamenta, que era peligro el estar allí como había dicho esa mujer antes.

¡Ni un carajo! ¡Un sueño dice!

Gire mi rostro hacia ella y la mire fijamente, al hacerlo me fije lo hermosa que era... tan hermosa como un ángel de mármol. Escuchando un ruido volví a girar mi rostro y mirada al frente para encontrarme de frente contra el gran animal, ese que era Jake y al que parecer no me reconocía o si... espera...

-Jak...e.. ¿Por que?.-No podía evitar el que mis ojos se posaran en los de el mientras se marchaba poco a poco, dando un paso hacia atrás y la oscuridad del bosque. Sin embargo eso no terminaba aun, no aun no pues ella seguía ahí detrás de mi observando mis movimientos.

Ahora si se había apoderado de mi el pánico y el miedo por saber que venía a continuación.

Tan rápido como que no lo vi venir, sentí y vi como todo se empezaba a ceñir de oscuridad como una de mis prendas negras. Cayendo al suelo inconsciente deje de ver todo a mi alrededor, solo algo frió y duro era lo que podía percibir cuando me cogió en brazos, no estaba completamente segura de ello pues podría ser uno de esos tan extraños sueños que siempre me visitaban.

El viento empezaba a golpear el cuerpo de la chica dormida, poco sentía excepto un pequeño frió que fue volviéndose cada vez mas intenso cuando paro de golpe. Parándose de golpe todo seso de pronto para volver a estar en un profundo sueño de placidez y agotamiento, tanto cansancio que apenas podía saber que era lo que estaba pasando en realidad.

Ni se lo imaginaba, todo menos eso de ser cargada por aquella mujer que daba mucho miedo a sin prevista cuando su rostro se deformaba. Planeando hacer como si no hubiera pasado nada y llevarla al hospital mas próximo para que se creyera que estaba soñando con un gran lobo de color marrón claro y una especie de super mujer.

¿Acaso creía que iba ser capaz de olvidar ese enfrentamiento? ¿Aquellas transformaciones casi mágicas? ¿Y el ver movimientos imposible de realizar al no ser que no fueras humano?

Clare estaba en estado de shock y eso me inquietaba mas aún. Yo seguía dando pasos atrás mientras la vampira intentaba convencerla de que todo era un sueño, todo parecía haberse detenido, como si el tiempo se hubiera esfumado y todo estuviera detenido hasta que Rosalie golpeó a Clare, eso me hizo abrir mis ojos de lobo de par en par y aullar como nunca lo habia hecho, notando como mi garganta se desgarraba por la fuerza de mi voz. La había hecho daño en mi presencia y para colmo, se atrevía a echármelo en cara y culparme de ello.

¡No es mi culpa maldita chupasangre! ¡Has dañado a una humana!- Gritaba, pero solo podía oírse una multitud de gruñidos y ladridos de lobo, solo en mi mente podía oir lo que yo decía, haciendo que me sintiera mas frustrado. Rosalie la tomó en brazos y con una suma rapidez comenzó a marcharse de allí, ¿a donde la llevaba?, ¿porque?, Yo no... yo no iba hacerla daño!.

Corrí con todas mis fuerzas por el bosque, siguiendo sus pasos gracias a que ahora podía aspirar su asqueroso olor, no iba a permitir que le hiciera algo pero en mi cabeza no caía tal posibilidad, pero... pero no me gustaba dejar a Clare en manos de ella... pero... ¿acaso estar conmigo iba a arreglar las cosas?. Me detuve al instante, sintiéndome hundido por el dolor de mis huesos, músculos y porque mi alma se encontraba demasiada atormentada como para seguir avanzando.

Rosalie... te juro que esto sera solo el comienzo... te haré pagar por esto...

Y a paso lento, abatido por lo que allí había acontecido me fui dirigiendo a casa... tenia que pedirle explicaciones a mi padre, saber que era lo que me había ocurrido... conocer mi desagradable e imborrable destino.

OFF: Pues creo que esto ha acabado, no me esperaba q te la llevaras Rosi ¬¬ te mataré.