Vuelta a la casa de Tessa.

Noté la presencia de Demetri. Frunci los labios y le indiqué a Tessa que siguiera con la pocion. Fui hacia donde estaban los chicos. -Parece que no te agrada mi presencia, no Demetri?- Exclamé con el ceño fruncido.

Demetri me tomó de las manos y senti algo de nerviosismo. Dirigí mis ojos a sus manos y luego los elevé a sus ojos. Sacudí mi cabeza por dentro, esto era confuso. -Al parecer segui los pasos de ustedes. Y...la mansion estaba un tanto aburrida. Espero no les moleste que pase unas mini vacaciones con ustedes...- Me encogi de hombros sonriendo dulcemente.

-No hay... ningun problema-
le sonrei
-Que hacen ahi dentro?-
oli un peculiar olor a azufre

Me solté de las manos de Demetri y giré el rostro, para ver hacia atras, donde Tessa se encontraba. -Estamos haciendo....algo.- Sonrei nuevamente y les guiñe un ojo a los dos, para meterme de nuevo en la casa. Tessa ya habia finalizado y me acerque a comprobar el aroma de la pocion. Perfecta; justa para entregarsela a Rose. Guarde todo rapidamente y salimos. -Listo! Estamos libres...-

Me acerqué a Demetri, acaricié su mejilla con suavidad sin dejar de verlo a los ojos. -Es cosa de chicas...- Guiñé un ojo y le di la espalda, dispuesta a salir de la casa.