Alex Wright

por **Alexia Wright** Miér Feb 04, 2009 2:18 am

~Nombre completo: Alexia Anne
~Apellido/s: Wright Madamour
~Apodo: Alex
~Edad: Aparenta 17 años, pero tiene 98
~Raza/Rango: Vampiro vegetariano

~Personalidad: Confiada, inocente y soñadora, son unas de las mejores palabras para describir la personalidad de Alexia suele hablar de más y dice cosas difíciles de responder. Adora leer, en especial novelas románticas, donde las situaciones narradas son muy distintas a las de su vida, aún conserva la esperanza de ser completamente feliz. Insoportablemente optimista, siempre buscando el lado bueno de las cosas, eso la ayudado a superar las múltiples desiluciones que ha sufrido, todo pasa por algo. Perdona, pero no olvida, ese es uno de sus mayores defectos, cuando alguien la traiciona de una u otra forma, es capaz de perdonar, pero la confianza no volverá a ser la misma.

~Aspecto físico: Al igual que la mayoría de los vampiros que se alimentan de animales, Alex posee ojos color dorado, un poco más verdoso de lo normal, rodeados por largas y tupidas pestañas oscuras. Su suave y brillante cabello color dorado cae en cascada hasta su fina cintura. Posee una belleza totalmente deslumbrante y llamativa, sus finas facciones, desde humana siempre fue alabada por su encanto, belleza y elegancia, definitivamente la inmortalidad aumentó esas cualidades, haciéndola un ser irresistible para los humanos. Es de estatura media baja, 1.65 m. aproximadamente, de contextura delgada y delicada.

~Habilidad especial: Debido a que cuando era humana en su familia nadie lograba comprenderla, ya que la consideraban fantasiosa y optimista en extremo para esa época, Alex se veía obligada a cerrar su mente y no dejarse afectar por el evidente rechazo de su familia hacia ella, en los grandes bailes de epoca, donde se reunían las personas de la alta sociedad, la joven se veía obligada a nunca decir lo que pensaba, y a ser políticamente correcta, por lo tanto al convertirse en vampiro desarrolló el don de poder bloquear cualquier otro don que pueda afectar su mente, que por ahora es totalmente inaccesible

~Familia:
·Padre-> Ethan Wright
·Madre->Clémence Madamour
·Hermano/as-> Hija unica
~Historia:
Alexia nació y creció en el seno de la adinerada familia Wright, en Londres, Inglaterra. Cuando la pequeña de cabellos dorados nació, fue una gran desepción para la familia, ya que esperaban que fuese un varón que pudiese heredar la fortuna que poseían. La señora Wright luego de tener a Alexia quedó estéril, incapaz de tener otro hijo, ahí empezaron los problemas para la recién nacida Alex, su padre Ethan fue el más afectado ¿Que dirían en las reuniones de alta sociedad al enterarse que ya no podría tener un varón?. Los señores Wright comenzaron a dedicarse a asistir a todas las fiestas y bailes que se celebraban en la ciudad y sus alrededores, en un intento de olvidar la desdicha acontesida hace un poco más de un año y medio, con el nacimiento de la pequeña Wright. Los 8 primeros años de Alexia los vivió rodeada de lujos, insignificantes y sin importancia para ella, se aburría la mayor parte del tiempo, ya que no conocía a más niños de su edad. Al cumplir 15 años la relación de Alex con sus padres cada vez empeoraba, ellos creían que su hija era una desagradecida, que no sabía apreciar todos lo lujos que ellos le daban, los hermosos y caros vestidos, las elegantes y finas joyas, etc. Alexia odiaba asistir a los bailes de sociedad, donde su padre no hacía más que buscarle un pretendiente, no estaba en los planes de ella casarse tan joven, y mucho menos sin estar enamorada, por lo que prefería quedarse leyendo o tocando el piano en casa, esas actitudes de ella incentivaron a sus padres organizar un compromiso arreglado, ya que con la personalidad que poseía la joven, dudaban que alguien la querría, se notaba demasiado el poco afecto que sentían por ella, a ojos de ellos Alexia era la culpable de todos los malos momentos que vivían como familia. Cuando la joven Wright cumplió 17 años, vivía sumergida en sus novelas románticas, soñando con ser la protagonista, y no tener que soportar las constantes discriminaciones de sus padres hacia ella.
Unas semanas después de su decimoséptimo cumpleaños sus padres le dijeron que se iba a casar en dos meses con un joven de otra familia adinerada, Alexia se negó rotundamente a hacerlo, lloró, gritó, como nunca antes lo había hecho en su vida, pero no consiguió nada. Completamente desesperada, esa misma noche huyó de casa, sin maletas, sin abrigo, sin recuerdos, estaba decidida a dejar atrás su antigua vida, tenía el extraño presentimiento de que las cosas iban a ir bien, ella siempre había sido buena, respetuosa, amable, leal, en fin, había sido buena en todos los sentidos, no merecía ser tan infeliz.
Corrió por el frío bosque que rodeaba la ciudad, corrió hasta que ya casi no podía respirar por el esfuerzo. Se sentó en un mohoso tronco de un árbol caído, intentando regular su respiración, y pensar hacia donde se dirigiría, después de todo, no conocía a nadie que la pudiese ayudar. Sintió que alguien tocaba su hombro, se volteó extremadamente asustada para encontrarse con unos hermosos y peligrosos ojos color carmesí. Desde ahí solo recuerda el peor dolor físico que alguien hubiese podido sentir, no sabe cuanto duró, quisas fueron horas, o días, tal vez semanas. Despertó en una sencilla habitación, recorrió el lugar con la vista, hasta que se encontró con los ya conocidos ojos carmesí que tambien la observaban, era el hombre más hermoso que ella había visto en su vida, Alexia le preguntó todo lo que pasaba por su cabeza, sin guardarse alguna duda, él vampiro respondió cada una de ellas, con paciencia. Así fue como ella se enteró en lo que se había convertido, al principio estaba horrorizada, pero supo sobrellevar muy bien su situación, vivió con el vampiro que la transformó durante unos meses, hasta que se separó de él, negandose a seguir cazando humanos, sola aprendió a controlar su sed, cazando solamente animales. Cuando su auto control fue suficiente, se mudó a Irlanda, ahí vivió 20 años, cambiándose de ciudad constantemente.
Ahora, con 98 años, Alexia se muda a Forks, un pueblo que parece ser agradable, y donde se puede salir durante el día, en busca de una vida más tranquila y posiblemente feliz